Soy Carmen Isabel López Ballesta, acabo de terminar la especialidad de MFYC en Zamora, y he tenido la inmensa suerte de conocer y formarme con el equipo de soporte de cuidados paliativos domiciliarios de esta ciudad.
Este equipo consta de tres grandes profesionales que destacan por su gran generosidad, por dar silenciosamente sin esperanza de halago o de recompensa, por humanizar la medicina, eso que tanto falta en la sociedad actual, por cuidar de sus pacientes y sus familias hasta el fin de los días, por enseñarme que una mirada, una caricia, o un silencio en el momento adecuado vale más que mil palabras.
Estas tres profesionales se llaman Nuria (médico), María José (enfermera) y Melda (psicóloga), ellas me han formado en gran parte de lo que sé sobre cuidados paliativos, por ello quiero daros las gracias.
- Gracias por cuidar y tratar el dolor total del paciente cuando lo vemos por primera vez, por aliviarle el dolor físico aplicando el tratamiento adecuado, por paliar su dolor emocional , psicológico y espiritual escuchando y aceptando incondicionalmente.
- Gracias por enseñarme que los cuidados paliativos son un arte, el arte de aliviar el sufrimiento.
- Gracias por entrar en la calidez de sus hogares, de sus vidas, y descubrir sus sonrisas que demuestran agradecimiento con una nueva ilusión; por ver en cada visita una mayor autoestima y bienestar del paciente y cuidadores, en definitiva, por proporcionarles calidad de vida.
- Gracias por dedicar vuestro tiempo sin mirar el reloj.
Estas palabras van por vosotras, porque lo merecéis, y puedo decir que en Zamora tenemos un gran equipo de profesionales dedicadas al cuidado del paciente en la última etapa de su vida, que debemos cuidar por su dedicación a ayudar a vivir hasta morir.
Gracias por tanto, siempre os recordaré y me sentiré orgullosa de decir que me he formado con el equipo de cuidados paliativos de Zamora.
Carmen Isabel.
Carmen Isabel. Zamora, 22 de mayo de 2020.