Desde el Equipo de Atención psicosocial de Burgos os mostramos unos vídeos de las sesiones de musicoterapia en el domicilio del paciente.
Desde las primeras experiencias musicales repetía un ritmo en el que fui encajando la velocidad e intensidad con diversas armonizaciones que pudiesen empatizar con el estado de ánimo y actitud de esta persona.
Poco a poco nos empezó a contar que era un ritmo que tocaba con la percusión junto con sus amigos, que tocaban otros instrumentos como la trompeta o el acordeón. Hacía alrededor de 80 años que había ocurrido, en distintas celebraciones de su pueblo, pero las recordaba con alegría y bastantes detalles. Así llegamos a encontrar músicas que se amoldasen a esa época de su vida y fuesen lo más cercanas posibles a sus recuerdos.
A lo largo de las sesiones el ritmo era estable, más bien lento, calmado y coherente, el paciente desempeñó el rol de líder en todo momento, con mucha presencia y concentración, y siempre terminaba las sesiones contando algún suceso divertido de su juventud.
