Un viaje precioso

Unos ojos abiertos de par en par agradeciendo la cura, una risa de las que hacen rebotar el cuerpo ante una broma, unas lágrimas a punto de derramarse que se consuelan en el agarre de unos dedos enfundados en látex, un cabello escaso y despeinado girándose adormilado para recibir la visita, un susurro acogido con…

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