Su atenta mirada hace que vayamos pasando a la sala en absoluto silencio, que implícitamente sepamos que debemos descalzarnos y sentarnos en las colchonetas. Ahora estamos preparados. Tew Bunnag se dirige a nosotros para tratar de introducir qué nos une como personas que atendemos al final de la vida y, lo más importante, cómo abordarlo a nivel espiritual. Lo primero es conectar, conectar con el entorno, conectar con el espacio, conectar con el suelo que pisamos, conectar con el cuerpo, y olvidarnos de las palabras. Para Tew, la conexión es crucial para vivir bien porque rompe todas las barreras. Pero, empecemos a dejarnos llevar, ahora que hemos conectado con el espacio vamos a hacerlo con nosotros mismos y con el que tenemos enfrente (el Otro al que tratamos de aliviar el sufrimiento de final de vida). Estoy conmigo, estoy contigo, estoy con nosotros. Y, ¿cuáles serán los principios fundamentales -la base de una vida espiritual-? La conexión con la presencia, la compasión, la transcendencia y la humildad.
Tew nos ha guiado hacia el mundo interno, ha llamado a la puerta emocional y espiritual que todos llevamos dentro con el objetivo de poder acompañar de mejor manera el sufrimiento del otro, nuestra labor diaria en cuidados paliativos.
Cristina Catalina Fernández.
La conexión con la presencia, la compasión, la transcendencia y la humildad. Eso resume como siempre he entendido la atención al final de la vida!